El doctor Javier Fernández Portales ha invertido más de 100.000 euros en el desarrollo de esta app, que, en la actualidad, es utilizada por médicos y especialistas de todo el mundo

Cerca de 20 años leyendo y explicando electrocardiogramas están detrás de la aplicación para móviles diseñada por el doctor extremeño Javier Fernández Portales. Esta experiencia y las dudas y necesidades de los colegas en el día a día hicieron ver al cardiólogo que «era necesario crear una herramienta de estas características aprovechando la potencialidad que ofrecen las nuevas tecnologías».

«Como cardiólogo fomentaba que, cuando algún médico tenía una duda sobre un electrocardiograma, no me lo comentase verbalmente, sino que me enviara una foto», declara el doctor. «Esto, inicialmente, lo hacíamos a través de sms, después por correo electrónico y, finalmente, por whatsapp». «Tuve para mí una colección de electrocardiogramas que generaban dudas y, mediante estos canales, podía resolverlas de una forma casi inmediata».

El creador de la novedosa aplicación ECG Camera trabaja, desde hace más de 10 años, en el Servicio Extremeño de Salud como especialista en Cardiología y dirige la Unidad de Cardiología Intervencionista en Cáceres. Además, es jefe de Servicio de Segunda Opinión, donde trabaja un equipo de cardiólogos para atender esta demanda. En la actualidad, preside también la Sociedad Extremeña de Cardiología. Y, antes de todo esto, durante 18 años, impartió clases en el curso Intensivo MIR Asturias, como profesor de cardiología de más de 20.000 médicos.

La ECG Camera puede ser utilizada entre el paciente y su médico pero cuando encuentra el máximo de sus potencialidades es en la comunicación médico — médico con fines asistenciales y docentes.

La aplicación móvil cacereña es idónea para los profesionales que trabajan en el 112 y en los centros de salud porque tienen a una consulta/clic una segunda opinión, además, de un especialista. Sin embargo «nuestro ámbito quiere extenderse a nivel mundial donde un especialista no es tan «barato» ni tan accesible», declara el doctor.

Toda esta transmisión inmediata de datos es posible, primero, por la implantación generalizada de los sistemas 3G y 4G y, segundo y sobre todo, «porque en Extremadura también se emprende, aunque muchos crean lo contrario».

El desarrollo de la aplicación ha necesitado una inversión de 100.000 euros que ha salido del bolsillo del doctor Fernández Portales, «pero tiene desgravaciones fiscales», señala para reducir la importancia de la cantidad. Este desembolso económico incluye el desarrollo de un algoritmo de forma conjunta con el hospital madrileño Gregorio Marañón y la publicación de un libro dentro de la propia App. Solo crear la aplicación para iPhone ha supuesto una inversión de 80.000 euros y otros tantos supondría su desarrollo para Android.

El desarrollo de la App ya va por su tercera versión –ECG Camera 2.0–. La próxima e inminente será la implementación de notificaciones inmediatas para profesionales donde, organizados en grupos, podrán discutir en tiempo real cada caso y solventar las dudas de sus colegas. Aunque su público objetivo son los médicos, enfermeros y estudiantes, también tiene un servicio de pago, a través del cual, cualquier enfermo que quiera consultar sobre su electrocardiograma puede enviarlo a través de la aplicación.

Hasta hace poco estaba disponible como servicio gratuito la posibilidad de una segunda opinión pero tuvo que ser cerrada al generar una demanda no controlada de consultas. «El paciente sufre una gran ansiedad cuando el médico le comunica que es necesaria una segunda opinión acerca de su electrocardiograma».

ECG Camera ya ha sido traducida al inglés y al portugués lo que facilita su utilización en otros países. De hecho, su diseñador ha «recibido e informado electrocardiogramas de todo el mundo», declara el doctor Fernández Portales.

Fuente: ElPeriódico Extremadura